Kapanga no necesita presentación: en 2015 cumplirá 20 años y esta ciudad integra, desde hace tiempo, una parada fija en sus giras. Sea en clubes cerrados o en las plazas públicas, la banda es sinónimo de fiesta y diversión. “Estamos celebrando con nuestro público del norte, porque desde el año pasado nos independizamos, y hemos podido viajar y tocar en México y en España y llevar adelante un montón de proyectos”, le contó Miguel Luna Campos a LA GACETA.
Claudio Maffia (batería y coros); Javier Memo Manera (bajo); Mariano Arjones, (teclados y coros); Martín Mono Fabio (voz), y Maikel Miguel Luna Campos (guitarra y coros), sin embargo, cuando regresan a sus casas, con sus familias, dejan de ser el Mono, Memo Maikel y el Príncipe. “La vida vuelve a la normalidad”, recuerda Luna Campos durante la entrevista, dando a entender que no todo es fiesta en cada existencia.
Ska y rock o rock y ska; tampoco es que a los músicos les interesa identificarse bien en qué estilo se ubican sus composiciones, pero tienen claro que “la música no va a cambiar el mundo”.
- En pocos días, presentan un nuevo disco.
-Así es, se llama “¿Mama dónde estoy?” y fue grabado en vivo en el Konek; viene con un DVD y refleja la nueva etapa del grupo. Es un recorrido por temas viejos y los más recientes de “Lima”, que salió el año pasado, pero que todavía estamos presentando en algunos lugares. Te diría que es una fotografía actual de los Kapanga. En el de esta gira, que la hacemos con los amigos de Las Pastillas del Abuelo y El Bordo, vamos a hacer ese recorrido.
- ¿Y dónde está parada la banda en estos momentos?
- Desde el año pasado somos una banda independiente; antes estábamos con PopArt y EMI, pero nos independizamos. Hicimos una gira por México, tocamos en España y un montón de cosas. Estamos gozando con la independencia, aunque te aclaro que siempre hubo buena relación con PopArt y EMI, pero ahora era el momento de tomar otras decisiones. También hicimos un estudio de grabación, que seguramente no lo vamos a usar nosotros solos, sino que invitaremos a otros grupos también.
- Kapanga se convirtió en una empresa, entonces…
- Sí, Kapanga es una empresa loca, pero empresa al final. Somos nuestros propios trabajadores y nuestros propios capitalistas. Todos tomamos las decisiones y nos cuidamos. Porque fundamentalmente, seguimos siendo un grupo humano que hace arte para divertirse.
- La fiesta y la diversión es una marca registrada de ustedes.
- Claro, pero primero nos interesa divertirnos a nosotros mismos y después compartir con el público, sobre todo el año que viene en el que cumplimos 20. Tenemos claro que la música no va a cambiar el mundo, pero sí puede cambiar una mirada; si alguien se divierte por un par de horas, cambia esa mirada…
- Pero también cuando tuvieron algo que decir, lo dijeron…
- Sí, eso sí, nunca fuimos pasatistas; en nuestra música hay una cuota de denuncia social pero desde el lado divertido, desde lo lúdico, que es lo nuestro. Recordá “El Mono relojero”, que muchos pensaron que era contra (Eduardo) Duhalde, pero en realidad la canción fue contra el cese de las libertades individuales. La prevención sobre la noche, entendemos, no pasa por prohibir cosas, sino con informar y hacer prevención.
- Han pasado casi dos décadas y la diversión sigue en la casa, me imagino…
- Cuando empezamos éramos muy jóvenes; hoy cada uno lleva su propia vida; cuando volvemos a la casa, con nuestras familias, no usamos los apodos del escenario. Somos bastante serios… El día empieza a las 7 cuando uno lleva los chicos a la escuelas, llevamos una vida normal… Después nos ponemos el traje de Kapanga.
ACTÚA HOY
• A las 22, en Club Floresta, en avenida Colón 471, junto a Las Pastillas del Abuelo y El Bordo.